¿Hasta dónde estamos dispuest@s a llegar?

En principio, pensaba alejar mi blog de contenidos demasiado serios, pues pienso que en mi primera etapa como blogger expuse más de la cuenta mis sentimientos y pensamientos y quedé algo agotada. No obstante, hoy me he llevado la sorpresa de que unos antiquísimos amigos míos, a los que puede que no haya vuelto a ver en más de quince años, han abierto un blog para hacer pública su indignación con todo lo que está sucediendo en nuestra sociedad, la manipulación tan grande de la que estamos siendo objeto a cuenta de la tan traida y llevada crisis y recesión, las cuales no pongo en duda de que sean reales, pero tampoco se me escapa que no son más que síntomas del fracaso de un sistema socio-económico-político que nadie sabe cómo apañar.

Familia de 3 hijos busca mundo diferente para vivir

Las medidas que el gobierno está tomando, como el abaratamiento del despido para, dicen, incentivar el empleo de jóvenes, no hacen más que ahondar las diferencias entre segmentos sociales, en este caso incluso se llegan a enfrentar, no ya clases, sino generaciones. Porque yo no me creo que estas medidas no se vayan a emplear para despedir por cuatro perras gordas a seniors que ganan un buen sueldo, para poner en su lugar a becarios o similares que se conformarán con lo que les den! Al menos, en un principio. Y esos seniors, personas mayores de 50 que seguramente han dedicado lo mejor de su vida a sus empresas, se encontrarán que ya no pueden, como antes, prejubilarse, o alargar el desempleo hasta la jubilación, porque, señores, la edad de la jubilación ahora es a los 67 años para la mayoría. A  la luz de lo que escribo se me ocurre que quizás el gobierno va detrás de incentivar el suicidio voluntario en masa - si todas esas personas voluntariamente se quitan de enmedio, imaginaos la de riqueza que se crearía - miles de empleos libres, grandes ahorros para la Seguridad Social y el sistema sanitario, viviendas gratis para sus descendientes, bueno, gratis tras pagar los consiguientes impuestos,...todo serían ventajas. El único inconveniente sería encontrar canguros gratis para los nietos del futuro, pero ya buscaremos au pairs en el Tercer Mundo, todo se andará.

En el blog que os he mencionado sus autores afirman, y yo me sumo a su propuesta, que ellos estarían dispuestos a renunciar a una parte importante de su sueldo, hasta una cuarta parte, siempre que supieran que con esa cantidad que se les desquita a ellos y entre otros muchos se fuera contratando a otras personas, con nombre y apellido, que compartieran el trabajo con ellos. A mí me parece una gran idea, una manera de que los seniors fuéramos mentores y de garantizar un suave relevo generacional.  ¿Para qué vamos a trabajar más horas y que nos paguen menos?  ;  se preguntan ellos y nos preguntamos todos, compartamos el trabajo y su beneficio. principal, que es el salario.  ¿Te apuntarías a una iniciativa así? ¿Piensas que tu sueldo no se estira como para compartirlo?

Y aquí os dejo con una foto en la que no se nos ve muy bien, pero se nos adivina. La época en la que todo eran sueños y aspiraciones,  pero no por ello menos reales que esta realidad de hoy en la que estamos, que se nos desintegra entre las manos. BESITOS.